16 de enero. Fondeamos en Cayo Francisquí.
// De nuevo al más bonito y familiar cayo de los Roques //
Esta vez hemos entrado en el archipiélago de los Roques sin problemas por la boca del medio. David esta alucinando con tanta maravilla alrededor… nos quedamos aquí dos días para que disfrute del snorkel en la piscina, una laguna formada entre la barrera de coral y la isla.
// Jugueteando en la piscina de Franciskí //
// Atardecer en el archipiélago //
18 De enero. Hoy hemos navegado hasta Isla Madrisquí y Cayo Pirata.
// Isla Madrisquí //
// Paso hacia Cayo Pirata desde Madrisquí //
// Llegando a Cayo Pirata //
// Pueblo pescador de Cayo Pirata //
Desde la playa de Madrisquí, hasta el otro lado de la isla, se encuentra el paso hacia Cayo Pirata por una barra de arena que cierra la laguna formada entre ambas, allí se puede disfrutar de todo el proceso de pesca, venta y embarque de la langosta en la temporada que va de noviembre a abril.
// Compramos una langosta a la familia de pescadores para despedir a David //
Compramos una para despedir la estancia de David en el Lycka, mañana vuela hacia Margarita para regresar a España.
// Despedida de nuestro sobrino David //
21 de enero. Fondeados en el Gran Roque vemos al Solitude y nos reencontramos con su dueño, nuestro amigo Cholas. Mañana tiene clientes brasileños para un charter y nos invita a saborear, esta vez, el parque tras él. Nos complace la idea, pues cholas es un gran conocedor de este paraíso.
// Fondeo en el Gran Roque //
// Encontramos a nuestro amigo Cholas en su Solitude //
// Comprando pescado en la pescadería del Gran Roque antes de partir //
Sin duda, si queréis navegar y disfrutar del parque, la mejor opción es su charter!! Él es el capitán, el marinero, el cocinero y el humorista; todo en una encantadora persona.
Su web site es www.losroques.info y su e-mail es cholasvigo@hotmail.com.
22 de enero. Salimos hacia el norte.
Pasamos por Noronquises, formado por tres cayos que encierran entre ellos una laguna de arrecife y llegamos a nuestro primer paraje después de dos horas de navegación. Entre Sarquí y Espenquí hay un estrecho paso entre islas y no hubiéramos pasado por ahí ni de coña si no fuera porque Cholas iba delante. El lugar lo merece. Fondeamos y recorrimos con la zodiac una laguna rodeada de manglares. Más tarde subimos a una pequeña colina, la segunda elevación que tiene el parque después del Gran Roque.
// Excursión a la cumbre de Espenquí //
// Romántica puesta de Sol en el Archipiélago //
Al día siguiente cambiamos de isla. Fondeamos en Carenero, un bonito fondeo entre esta isla y San Felipe.
// Fondeo en Carenero //
Por la mañana practicamos un poco de snorkel y por la tarde hicimos sesión de fotos en este bello lugar. Vimos la puesta de sol desde un modesto restaurante de langosta donde vive una familia.
// Rancho del Amor, Restaurante Carenero //
// Ayudando a su familia //
// Paseando al atardecer por la espectacular isla //
Levantamos el ancla a las 9 de la mañana y nos dirigimos a uno de los lugares más visitados por el turismo, Cayo de Agua.
// Panorámica de Cayo del Agua //
Allí hay un gran arenal que, con la marea alta, deja separada una parte de la isla; se entrecruzan las dos aguas y forman un paisaje inusual. No estuvimos allí el día adecuado para ver este fenómeno pero las fotos existentes muestran la gran belleza del lugar. En esta isla también se encuentra un pequeño oasis de película formado por unas pocas palmeras alrededor de un pozo de agua dulce en la arena donde, antiguamente, los pescadores con sus cayucos (entonces a vela) tardaban un día en llegar, otro día en recoger agua y otro de regreso al Gran Roque para tener suministro de agua potable en el pueblo. Hoy en día, con la desalinizadora todo ha cambiado.
// Oasis en Cayo del Agua //
// Cholas busca agua en el pozo natural de agua potable //
// Cangrejo bizco en la playa //
De aquí pasamos a Cayo Dos Mosquises. La entrada al fondeo lo marca una de las tres palmeras de Dos Mosquises Sur.
// Llegamos al paraíso Dos Mosquises //
// Fondeo junto al Solitude rodeados de aguas turquesas //
En Dos Mosquises Norte se encuentra la Estación de Investigación de Biología Marina, donde se realizan trabajos de investigación ambiental biológica y de Antropología y arqueología. Se han encontrado restos que datan del 1300 de pescadores que venían del continente a la isla en busca del preciado Botuto. Con el tiempo se instalaron aquí y ofrecían culto a esta gran caracola. También visitamos el gran trabajo que hacen aquí con la protección de las tortugas (en los roques se encuentra una de las dos especies mas grandes del mundo).
// Centro de Investigación de Biología Marina //
// Los pájaros buscan agua dulce en el pozo natural //
25 de enero. Esperando una buena predicción de tiempo, seguimos navegando por el archipiélago hasta Sarquí, donde viven tres de estos simpáticos animales. Sacan la cabeza y se zambullen todo el día alrededor de nuestro velero.
// Esperando buena predicción para salir hacia República Dominicana //
27 de enero. Estamos fondeados en Crasquí. El tiempo esta revuelto y no nos permite salir hacia Republica Dominicana como teníamos previsto.
Terminamos nuestro recorrido por el parque y regresamos al Gran Roque a esperar que esta nueva luna cambie para que la predicción metereológica nos deje cruzar a nuestro nuevo destino.
// Fondeo en Crasquí //
// Cena por todo lo grande en el Solitude //
29 enero. Desde estas líneas agradecer a nuestro amigo Cholas por la tranquilidad que nos ha dado al navegar tras su estela; pocos sitios hay como este para disfrutar de la navegación. El mar como un espejo y el colorido del conjunto, hacen del archipiélago la más grande y bonita acuarela del mundo y la dicha del que lo puede ver.
// Últimos paseos por el paraíso //
31 de enero. Sigue la inestabilidad en la mar pero, aquí en los Roques, estamos en el mejor sitio del mundo para esperar.
// Felicidad tras un recorrido increíble con Cholas //
Hoy Lucia, una joven y dinámica Italiana amiga de Cholas, nos ha invitado a comer pasta en su posada. Ella es la dueña de una de estas magnificas casas restauradas del Gran Roque, “Piano y Papaya” es su nombre, y posee 5 habitaciones acondicionadas para acoger al mas exigente turista, por su trato familiar y su elaborada cocina.
// Bonita posada Piano y Papaya, en el Gran Roque //
