// El Lycka entra en el paraíso de Kuna Yala //
// Banderas de Kuna Yala, bandera de la revolución y bandera de la cultura kuna //
Kuna Yala es una comarca indígena de Panamá habitada por la etnia kuna. Antiguamente la comarca se llamaba San Blas. Su capital es Porvenir. La comarca de Kuna Yala (tierra de los kuna) posee 373km de largo en la costa del Caribe Panameño, es un archipiélago de 365 islas de las cuales 36 están habitadas.
Los kunas se dedican a la agricultura (los cocos son su moneda de cambio), a la pesca artesanal con pequeñas redes o con sedal y a la artesanía.
// El hombre kuna se dedica a la pesca y a la artesanía //
La mujer kuna tiene como principal ocupación la confección de sus famosas Molas, exhibidas en los principales museos del mundo. Estas aportan a la comunidad un gran presupuesto. Para ellos estas confecciones tienen una gran importancia, pues son obras de arte que identifican su tradición y cultura y constituyen para muchas familias la única fuente de ingresos, o por lo menos la principal.
// La mujer kuna aporta a la comunidad un gran presupuesto con sus molas, q a la vez sirven para la confección de su traje típico //
Existen instalaciones turísticas, la mayoría son pequeños hoteles ecoturismo (tres o cuatro cabañas son lo que forman un hotel situado en algún islote).
// Pequeños hoteles ecoturismo en alguna de sus islas //
Otra fuente de ingresos es el dinero que envía la familia que trabaja en Panamá y Colon.
Kuna Yala es una autonomía desde 1925 y nace a partir de la Revolución Kuna. Los abusos de la policía corrupta traída de Panamá, acusada de suprimir las costumbres kuna y el saqueo de caucho, oro y tortugas, hizo que el pueblo se levantara en armas y obligara al gobierno de Panamá a formar un tratado de paz. Los terrenos son propiedad de la aldea; cada hombre tiene la obligación de participar en los trabajos del bosque, plantación de palmeras y mantenimiento de sus ríos, y las mujeres de mantener el pueblo limpio a diario. Los Kuna pagan impuestos a la aldea por la venta de comestibles y por sus manualidades. Varias asociaciones internacionales les ayudan.
// Venta de molas de Lisa en la isla de Chichime //
El cayuco llamado Ulu es su único medio de transporte, actualmente muchos están ya motorizados, pero la mayoría van a remo muchas millas para trasladarse de una isla a otra. El Ulu genuino es un tronco de árbol tallado a puro machete.
// El Ulu es el medio de transporte de la tribu kuna //
Actualmente la autonomía tiene una organización político-administrativa propia según cada comarca, existen 38 comarcas y 4 distritos formados por pequeñas islas. En tierra firme no hay poblaciones, ni carreteras, ni caminos a lo largo de la costa. El congreso General Kuna es la máxima autoridad; se reúne 2 veces al año y los votos son tomados por cada Sahila (es como el alcalde de cada comunidad).
// Reunión del Congreso con el Sahila, el alcalde de la comunidad //
Los niños están bien escolarizados. En la época escolar viven en las islas más pobladas donde el gobierno de Panamá les facilitó ayuda para construir grandes colegios.
// Típica escuela pública situada en una de las islas habitadas //
18 de Mayo. Estamos fondeados en un bello lugar formado por dos islas y un pequeño islote con tres palmeras que marca la entrada a Chichime.
// El islote de tres palmeras nos marca la entrada a Chichime //
En la isla pequeña viven dos familias; Raúl es un joven kuna que sale al encuentro del nuevo velerista que llega a su isla. Es amable y servicial. Con él, Salvador sale de pesca por el gran arrecife que nos rodea y, al día siguiente, celebramos con su familia el cumpleaños de su niña kuna de tres añitos. Nos reunimos allá la tripulación de varios barcos que estamos fondeados entre estas dos islas y con las langostas, que pagamos todos a medias, ellos nos preparan un jugoso arroz con coco y langosta.
La mamá de los dos niños me pide que les saque fotos a sus hijos para tenerlos fotografiados, esto será posible porque le mandaré a mi hija por correo electrónico las fotos y ella, que ha de venir en agosto de vacaciones por aquí, las traerá reveladas.
// Raúl y Salvador salen de pesca hacia el gran arrecife que nos rodea //
// Celebramos el cumpleaños de la niña kuna con otros veleristas //
En la otra isla hay una bonita playa de blanquísima arena de coral y muchas palmeras. El agua es azul turquesa debido a la transparencia de esta y al fondo de arena, es el prototipo de todas estas islas de Kuna Yala. Es un hermoso paraje Caribeño y, al estar las islas habitadas por indígenas, les da un toque de distinción, es un paraíso.
// Un paraíso en Panamá, Chichime //
// Típicas cabañas kuna y su interior, cocinando un día festivo //
El dueño de esta isla es Humberto. Él tiene un par de cabañas para el turista que puede llegar hasta Cartí por tierra. Los recoge con su lancha y los trae a este rincón del mundo. Bajo un toldo de palmera tiene un frigorífico como el de nuestras cocinas de casa y, con un generador que le da energía, tenemos un pintoresco bar llamado Johnny Maracas. En él nos reunimos al atardecer para tomar unas fresquísimas cervezas.
// El famoso bar de Chichime, Johnny Maracas //
En Chichime, nos hemos quedado una semana, así conocemos a Bruno e Ingrid (Canarios), a Raúl (Uruguayo), y a Sebastián (Argentino). Sebastián es una de esas personas que no se olvidan, con 23 años ya tiene su barco propio; lo reflotó en Colón y se lo compró al propietario. Pienso que ese barco el Schieda no pudo caer en mejores manos, este bondadoso muchacho vive para su barco y para hacer favores a todo el mundo. Todos ellos se dedican al chárter de mochileros entre San Blas y Cartagena.
// Conocemos a los que serán nuestros grandes amigos de Kuna Yala, Ingrid & Bruno, Raúl, y Sebastián con sus papás //
En el Nutella, un barco Valenciano, hicimos la gran despedida, Felice y Roberta están trasladando este barco desde la Polinesia hasta España y, como buenos Italianos, nos cocinaron pasta y pizza con su agradable compañía.
// Gran despedida en el Nutella junto a Felice y Roberta //
Después de comprar un delicioso pan que cocinan los kuna en su chabola, partimos hacia Porvenir.
21 de Mayo. La navegación por Kuna Yala es muy difícil, está lleno de arrecifes bordeando cada isla y muchos bajos; lo bueno es que la distancia entre islas es muy corta.
De Chichime partimos en compañía de Sebastián y sus papás que están visitándole estos días encantados de conocer la bonita vida que eligió su hijo con su velero.
En una hora llegamos a la capital de Kuna Yala, allí está la oficina de emigración y capitanía, y una pequeña pista de aterrizaje para pequeñísimas avionetas que llegan desde Ciudad de Panamá.
// Oficina de migración en Porvenir, capital de Kuna Yala //
// Increíble pista de aterrizaje en Porvenir para las avionetas que llegan de Panamá //
// Muelle de Porvenir con vistas a Wichubwala y Nalunega y chapuzón //
Después de hacer nuestra entrada en Porvenir, levantamos el ancla y nos vamos a fondear a las islas de al lado, entre Wichubwala y Nalunega.
// Levantamos el ancla rumbo Wichubwala con Sebastián y sus papás a bordo del Lycka (foto navegando y de la isla de Wichubwala //
Bajamos a tierra por un pequeño muelle que tiene Wichubwala. Estas dos pequeñas islas están superpobladas. Allí nos encontramos con una de sus grandes escuelas y la pequeña tienda de comestibles donde no encontramos casi de nada, así aprendemos a movernos entre estos amables indígenas que empiezan estar acostumbrados a recibir a tantos veleristas que pasamos por aquí.
// Vista de Nalunega desde Wichubwala //
// Intentamos encontrar víveres en la pequeña tienda de Wichubwala //
La mujer kuna cuida mucho su imagen; ellas visten todavía su traje típico compuesto por una blusa confeccionada con una mola y tela estampada con grandes mangas hasta el codo. En los brazos y piernas lucen sus joyas, grandes tiras de bolitas de colores enrolladas. Salen siempre a tu encuentro vendiendo su artesanía. Las Molas son bordados muy trabajados; algunas de ellas necesitan un mes de dedicación. Se pueden conseguir por 10/15/20$ según su trabajo.
// Trajes típicos de la mujer kuna y sus joyas //
24 de Mayo. No es inusual encontrar barcos encallados en los arrecifes; hemos encontrados varios de ellos en diferentes lugares. Se te encoge el corazón al verlos! Una mala maniobra o un despiste hace que estos barcos, la mayoría de ellos cargueros, se queden encallados en las rocas y mueran allí.
// Carguero embarrancado en frente de Chichime //
Esta mañana, frente al fondeo de Nalunega, mientras desayunábamos en cubierta, hemos presenciado como el carguero que traía provisiones a este lugar ha encallado y se ha hundido parcialmente en unos minutos. Han acudido a él muchos cayucos, primero a ayudar y más tarde, a saquear todo lo que se podía reflotar.
// Poblado de Nalunega //
A las 11am levantamos ancla y salimos hacia un nuevo fondeo, Lemon Cays. La entrada en este lugar creo que es una de las más dificultosas, hay muchísimos bajos. Si no fuera por el libro publicado por el alemán Eric Bauhaus, que nos muestra cada fondeo recomendado y como llegar, no sería posible navegar sin encontrarse con serias dificultades. Es cierto que el color del agua y la espuma que forma el arrecife ayudan mucho pero, según está la marea y la posición del sol, visualmente no es fácil distinguir la entrada.
Lemon Cays tiene varias islas y diferentes fondeos pero, hace un mes, se concentra mucho velero en Lemon West ya que en isla Elephant, a un kuna se le ha ocurrido la brillante idea de montar un internet en su isla. Así que todos en un momento determinado de la visita por Kuna Yala pasamos por allí a conectarnos con la familia y el mundo exterior. El fondeo es grande y concurrido, es por eso que a diario acuden los kuna con sus botes a vendernos pescado, fruta, verdura y sus molas.
// Compramos pescado al kuna por 1$, pescado fresco a domicilio //
// Compramos molas a las mujeres kuna que llegan hasta el Lycka con sus ulús //
Con la cerveza fresquita del bar, el internet y el repuesto de víveres nos quedamos aquí casi otra semana.
// Bar con Internet en Lemon Cays, increíble pero cierto! //
1 de Junio. Salimos de Lemon por un paso entre islas más fácil de lo que fue la entrada. Tomamos rumbo hacia Cartí. Este es un pequeño grupo de tres islas con una población muy densa también. Es la más visitada por el poco turismo que llega ya que es la m{as cercana a la costa, y es allí donde termina la carretera que viene de Panamá City, donde solo acceden 4x4 que se dedican a traer turistas hasta este paraíso tan escondido.
// Llegamos a Cartí, la entrada de Kuna Yala para el turismo //
La comunicación por tierra en Kuna Yala es nula. Esta franja estrecha de Panamá es todo selva muy densa, hasta bien entrada tierras colombianas no vive nadie. Los kuna solo viven en sus islas, quizá no supera a ocho los poblados que están en tierra firme a orillas del archipiélago.
Hemos bajado a comprar algunos víveres a la pequeña tiendecita donde encontramos escasamente algunas latas en conserva. La fruta y la verdura no las trae el barco hasta mañana, así que nos vamos sin cosas frescas. Menos mal que preguntando y preguntando, nos han conducido hasta una choza donde la familia vendía pollo y algún tomate y cebolla. Los precios no son excesivamente caros, solo algo más que en continente y se agradece mucho lo poco que se encuentra.
Subimos el ancla y nos dirigimos a una pequeña isla al sur, Acuadup. Esta isla posee un poblado más tranquilo. En él, nos recibe un kuna que nos lo enseña todo en un pequeño paseo. Allí descubrimos como es la vida en comunidad y como los habitantes se las han ingeniado para tener un baño privado para cada familia sin ensuciar la tierra. En Acuadup viven 500 personas de las cuales 250 son niños. Salen a nuestro encuentro gran cantidad de ellos, pues ya habían salido de la escuela y no pude contentar a todos con los veinte chupa-chups que llevaba en el bolso.
Alberto, el chico kuna que nos acompaña, nos presenta al Shaila (cherif o alcalde). Es una costumbre entre ellos pedir permiso a su Shaila para todo ya que él es su jefe y su guía espiritual. Le presentamos nuestro respeto y permiso para pasear por su pueblo. Allí compro mis dos primeras dos molas que darán colorido al salón del Lycka.
// Fondeamos en Acuadup, un pequeño poblado al sur de Cartí //
// Aquí descubrimos como es la vida en comunidad. Los baños son todo un ingenio! //
// Este cerdo es muy limpio, tiene su propio baño //
3 de Junio. Hace ya tres meses de nuestra entrada en Panamá y tenemos que volver a Porvenir para arreglar los papeles de salida del país. Allí encontramos a Sebastián con su velero. Está intentando conseguir un cerdo para asarlo en Chichime esta noche junto con otros veleristas a los que conocemos, y nos invita a juntarnos con ellos.
Navegamos otra vez hacia Chichime con él. Como buen argentino y cocinero de profesión, Sebastián sabe como asar un jugoso cerdo entero y yo, con mi experiencia familiar en tocinería, le ayudo a despellejar el cerdo que le vendieron con todo el pelo.
Fue una animada velada esperando a que el asado estuviera listo. El cerdo lo pagaron dos españoles que conocimos en Lemon, Toni de Mataró y Peyo, el capitán de San Sebastián.
// Acabamos el día con un buen asado Argentino, con Sebastián de cocinero y yo de pinche //
4 de Junio. Después de comer un gustoso marmitaco en el barco de Peyo, volvemos a Lemon ya que tenemos problemas de gas, y allí un norteamericano velerista tiene la solución para rellenar nuestras bombonas.
5 de Junio. Otra vez en Elephant. Aquí el kuna Beto que puso el internet tiene un gran colaborador, un alemán llamado Yogui que con su ingenio europeo trata de solucionar muchas de las necesidades que tenemos los navegantes cuando nos quedamos demasiados días en este apartado paraíso de la civilización.
// Estupendo baño en aguas transparentes //
6 de Junio. Yogui nos pone en contacto con el norteamericano que tiene el invento de la doble válvula, una manguera que en un extremo tiene la válvula de camping gas (la bombona europea) y en el otro la válvula de Panamá, diferente a la del resto del Caribe. Así, con la bombona de gas que nos vende Yogui, traspasamos y rellenamos las nuestras, un gran problema más solucionado.
// Rellenamos las bombonas de gas, al estilo kuna, con la ayuda de otros veleristas //
Por la noche, se organizan los sábados una cena colectiva en el bar y bajamos a la tertulia. Casi todos los veleristas que hay por aquí son americanos, menos mal que entre ellos está Glenda, una joven venezolana casada con Eddie, un holandés que viaja con su velero, el Helena. Nos despedimos de ellos. Seguramente a nuestro regreso, en un mes, les encontraremos todavía aquí ya que Yogui a montado una gran pantalla y todos se quedan a ver el mundial de fútbol.
// Las cenas y tertulias de Lemon Cays //
// Mi amiga Glenda y su esposo Eddie, tripulantes del Helena //
El eterno problema del agua nos lo ha solucionado Augusto, el kuna que guarda la bonita isla que tenemos en frente. Nos llena todos los bidones que tenemos con el pozo de agua que tiene isla Billy (o la isla de los mosquitos).
Partimos hacia Holandeses Cays.
7 de Junio. Este conjunto de islas son los callos que están más al Noreste del archipiélago, muy visitados porque en ellos se encuentra la famosa piscina; pero hacemos una parada antes en la isla de un kuna amigo, Julio. Su isla se llama Waisaladup y sale a nuestro encuentro al vernos fondear. No nos cobra los problemáticos 10$ que los kuna se están acostumbrando a pedir por fondear y visitar sus islas.
// Una parada en Waisaladup, la isla de Julio que forma parte de Cayo Holandeses //
Al atardecer se acerca un bonito velero al fondeo, acaba de pasar una tormenta y, Salvador hace el comentario... ¿Qué hacen estos navegando con este tiempo? Cuando la vista me deja verlo más de cerca me parece reconocerlo, no puede ser… pero me da la corazonada de los que nos están filmando desde proa son la tripulación de nuestros queridísimos amigos del Milagro. En unos segundos pasamos de la incredibilidad a la euforia. ¿Cómo han llegado desde la Ceiba (Honduras), hasta estas coordenadas donde nos encontramos nosotros? Saltamos al dingui y vamos a recibirles! Ahí nos cuentan como fueron cómplices con nuestra hija, que sabe siempre exactamente nuestra posición report. Por internet les informó y entendí la llamada de nuestra amiga en común, Lilo, solo media hora antes preguntándome las coordenadas con la excusa de que ellos con el Gusto y el Caima venían ya por Kuna Yala.
// Tras una tormenta nos sorprende el Milagro y su tripulación, no podemos creerlo!! //
8 de Junio. No podíamos habernos encontrado con el Milagro en mejor lugar, este paraje no es de los más hermosos, pero la isla se presta a lo que más le gusta hacer a Leoni, pescar.
Este Leoni es la “hostia” a las 9h de la mañana ya teníamos la comida asegurada para varios días las dos embarcaciones, es increíble el arte de este muchacho, había pescado una cherna “familia del mero de 70 a 80kg de peso con el arpón y con una punta explosiva, invento de buen cubano como es él. Y no fue el único pescado, mientras nosotros hacíamos una fogata en la playa con cascaras de coco para asar parte de la gran cherna, él se fue un ratito al arrecife y se trajo otras dos piezas más, estas de un tamaño más común aunque grandes también.
// Increíble pesca. Este Leoni es la hostia!! //
// Un bañito con nuestros queridos amigos antes de encender una fogata en la playa para asar esa cherna //
9 de Junio. Esta mañana, después de desayunar, se han acercado al Milagro las mujeres kuna de las dos familias que viven en la isla junto a Julio. Les hemos comprado molas y pulseras, y yo he conseguido mi tercera mola a muy bajo precio, es una figura geométrica muy trabajada.
// Las mujeres kuna se acercan al Milagro y les compramos algunas molas //
Hoy cambiamos de fondeo para que nuestros amigos no se marchen de Kuna Yala sin conocer la famosa piscina que está a tan solo 5 millas. Llegamos a un fondeo rodeado de pequeñas islas y cerrado al norte por el arrecife. El agua es de una transparencia increíble y por debajo de los numerosos veleros que estamos allí fondeados viven cantidad de peces de distintos colores.
// Espectacular transparencia del agua en Cayo Holandeses //
Después de comer en el Milagro una buena pasta con pescado, empezamos a despedirnos de la corta visita de nuestros amigos. Ellos, esta vez, solo están de paso; vinieron a Panamá por negocios y deben regresar.
// Despedimos al Milagro con un hasta pronto //
Después de un pequeño frente llamada aquí Culo de Pollo (fuerte viento de 35 a 40 nudos acompañado de tormenta) que les causó problemas con el ancla, nos quedamos muy triste mirando como se aleja el Milagro con su querida tripulación. Nosotros nos quedamos aquí un par de días más.
11 de Junio. Navegamos hacia las islas que forman el conjunto de Coco Bandero. Al acercarnos, decidimos fondear frente a una pequeña islita de arena blanca, tan pequeña que el paseo alrededor de ella no es más de 2 min. En el centro tiene cinco palmeras que le da el aspecto de un pastel en medio del mar. Aquí no hay nadie más que nosotros y nos sentimos en ella como los únicos supervivientes de la tierra.
El tiempo es muy soleado. Por las mañanas disfrutamos de nuestra pequeña islita haciendo snorkel y, por la tarde, bajamos a otra isla de al lado mayor que esta, en la que hemos descubierto un pequeño pozo de agua dulce. Allí nos duchamos y comemos coco.
// Día espectacular en nuestra pequeña isla de Coco Bandero //
// Una duchita en el pozo de agua dulce después de comer unos cocos bien sabrosos //
Hasta aquí no hemos tenido problemas de cobertura móvil. Hoy hemos recibido la llamada de mi amiguita Lilo; mañana zarpan de Portobello dirección Cartagena de Indias. Ella, Chechu y sus hijos, viajan en el Gusto, el nuevo velero que compraron en la Ceiba cuando los conocimos; y Ulises y la Nena van detrás con el pequeña Caima, su muy querido primer velero con el que navegaron por todo el Caribe. De paso por Kuna Yala quieren visitarnos y les hemos hablado de nuestra pequeña isla.
14 de Junio. Estoy ansiosa mirando el horizonte esperando divisar en él dos pequeños puntitos. Tengo ganas de volver a ver a mi amiga Lilo y conocer a sus tres hijitos. Con ella en la Ceiba nació una bonita amistad y lo pasamos muy bien. Hoy está prevista su llegada.
Ahí están, los llamamos por la emisora y les indicamos la entrada al fondeo. Primero recibimos al Caima que ancla detrás nuestro que nos trae algunas provisiones de la ciudad. Delante ha fondeado el Gusto. Enseguida bajamos todos a bañarnos a la islita y los niños gozan de este paraíso.
// Por fin llegan nuestros amigos del Gusto y el Caima //
Chechu les ha comprado a unos kuna, que se han acercado con su bote, un lote de varias langostas y centollos por 20$ y después del bañito nos vamos a la isla del pozo para hacer una fogata y cocinar en ella la barracuda que Ulises a pescado en el viaje y las langostas que Chechu a comprado.
Terminamos el día con tertulia en el Gusto, degustando unos buñuelos de pescado que les he preparado con los restos de barracuda asada.
15 de Junio. A las 6 de la mañana el Gusto levanta su ancla y el Caima le sigue. Ellos parten hacia Cartagena para dejar al pequeño velero varado. Ulises, que trabaja como capitán en él, regresará a su pueblo, Portobello y el Gusto se quedará por la zona para seguir disfrutando de sus vacaciones.
Nosotros navegamos solo 3 millas hasta la isla de Narganá, donde hay un gran poblado.
// Isla de Narganá //
Bajamos a tierra para pasear y comprar, nos ha costado mucho conseguir agua embotellada ya que los kuna beben solo agua de lluvia. Es un lujo comprarla! Nos ha costado más que el ron, 3$ el galón (el galón es la medida equivalente a 3,9 litros; y la libra es la medida equivalente a 0,5kilos).
Paseamos por este gran poblado, no es tan denso en habitantes porque está muy cerca de continente donde hay una de los pocos pueblos habitados en tierra firme. Su nombre es Río Diablo. Esta isla está unida a otra por un puente y la población se divide entre las dos, Narganá y Corazón de Jesús.
// El puente que une las islas de Narganá y Corazón de Jesús //
Este fondeo es el paso de todos los kayucos del pueblo, así que con la compra hecha nos vamos a pasar la tarde-noche a la isla de Farewell.
// Fondeo frente al pueblo de Narganá //
16 de Junio. Después de disfrutar de este hermoso fondeo donde el mar y la tierra ha formado una bonita lengua de arena de aguas turquesas, seguimos nuestro viaje por Kuna Yala.
// Fondeo en Farewell //
Pasamos por isla Tigre que tiene un pequeño poblado y fondeamos, para dormir, en isla Mono. Está isla está demasiado pegada a continente y por la noche se nos comen los mosquitos, es pura selva esta franja entre Panamá y Colombia.
18 de Junio. Llegamos a Ustupú después de hacer una gran tirada hasta la salida de Kuna Yala. Esta isla tiene más influencia colombiana por su cercanía y a su gran poblado llegan las provisiones por mar desde esas tierras. Recibimos la visita de varios kunas que, con sus cayucos, pasan por delante nuestro en dirección hacia el otro lado de esta gran bahía, donde tierra firme les da gran cantidad de mangos, bananos y tierra para el relleno de sus casas.
Al cambio de unos chupa chups para los más pequeños ellos nos regalan unos deliciosos mangos.
// Pescamos una gran barracuda //
19 de Junio. Llegamos a isla Pino. Es la única isla de Kuna Yala que no es llana y con palmeras como todas las demás. Esta tiene forma de cono y en sus laderas hay numerosos pinos.
Bajamos a tierra por un largo pantalán. A la entrada del poblado encontramos la gran escuela. Nos bebemos una cerveza en una pequeña tienda y, allí, conversamos con el shaila de la isla que nos hace pagar 8$ por el fondeo; y con el profesor kuna que nos pregunta si sabemos instalar unas placas solares.
// Poblado de Isla Pino, la única isla verde y montañosa de Kuna Yala //
Al día siguiente Salvador contribuye con la instalación de la luz eléctrica en el colegio. Ellos tienen todo el material para la instalación; luces, cable eléctrico, batería y placas solares; pero no saben como hacerlo ni tienen herramientas.
Después de toda una mañana de trabajo, Salvador les deja la instalación terminada. La escuela de isla Pinos ya tiene luz y nos sentimos satisfechos de haber servido a esta comunidad.
// Salvador instala la luz eléctrica al colegio de Isla Pino //
21 de Junio. Nianega. Seguimos dirección este hacia la frontera con Colombia, vamos pegaditos a la costa a través de un sinfín de pequeñas islas. Es una bonita navegación y un paisaje espectacular.
Por la tarde paramos para pasar la noche delante de nianega, la isla de los niños. Acuden de seis en seis en sus botes a visitarnos. Les regalamos caramelos y galletas.
// Los niños de Nianega acuden al Lycka en busca de caramelos //
Estamos ya a solo 25 millas de Sapzurro. En esta isla terminamos nuestro gran viaje por tierra kuna.
